En los últimos meses se ha hablado mucho sobre la moda de beber “agua cruda” (raw water, en inglés) en Silicon Valley y otros lugares. Algunas personas están comprando agua a precios elevadísimos (aprox. $70 por menos de 4 litros) por sus supuestos beneficios para la salud. Esta tendencia ha suscitado bastante polémica, ya que muchos expertos dicen que esto no es seguro.
¿Por qué beber agua cruda?
Los humanos han bebido agua dulce sin tratar a lo largo de toda nuestra existencia, hasta los últimos 100 años. El agua potable sana fresca estaba disponible en la naturaleza de manera muy accesible. Además el agua de los manantiales de la montaña contiene a menudo más minerales que el agua superficial (lagos y ríos), ya que va incorporando minerales de las rocas y de otra materia orgánica. El agua con alto contenido mineral como el magnesio, el calcio, el sodio y el hierro es beneficiosa para nuestra salud a largo plazo. Tal vez también podría aumentar la resistencia a las bacterias y otros contaminantes en el tiempo, pero ¿vale la pena el riesgo de intentarlo?
¿Por qué podría ser malo para ti?
No todo el agua de manantial es igual. Por ejemplo, el agua proveniente de glaciares no debe consumirse, ya que a menudo contiene pequeñas partículas de roca (talco), y algunos parásitos. También es imprudente consumir agua de manantial de las montañas cercanas a las ciudades o industrias contaminantes, ya que es posible que esté contaminada por el agua de lluvia que penetra hasta estos manantiales.
El agua cruda de un pozo definitivamente no es recomendable si vives cerca de una zona poblada o agrícola. Desafortunadamente, los humanos han logrado contaminar agua subterránea, ríos y lagos con pesticidas, desechos industriales y todo tipo de sustancias perjudiciales.
También hay otras cuestiones como las bacterias que nuestros cuerpos ya no se utilizan demasiado, los altos niveles de ciertos minerales que son agua insalubre o contaminada.
¿Es el agua cruda más saludable que el agua del grifo tratada?
No hay ninguna evidencia científica de que el agua cruda sea más saludable que el agua tratada, pero tampoco de que no lo sea. Los estudios de metanálisis del agua del grifo clorado han indicado que consumiendo este tipo de agua puede haber un pequeño aumento en ciertos tipos de cáncer (colon y cáncer de mama). El riesgo se debe principalmente a los bi-productos del cloro, que se pueden reducir extensamente con un filtro de agua asequible como TAPP 2. Por otra parte, eliminar el tratamiento con cloro provocaría que millones de personas se vieran afectados por enfermedades que se descubren en el agua cada año.
Además de esto, el agua cruda no contiene necesariamente más minerales que el agua de grifo. El agua de grifo tratada proveniente de áreas con agua dura como Barcelona o Denver tiene un contenido mineral similar a los manantiales de montaña o al agua de manantial embotellada.
¿Qué puedes hacer tú para asegurarte de que tu agua druda es segura para beber?
Llenar tus propias botellas en las montañas podría ser bueno para el medio ambiente, tu salud y tu bolsillo. Pero si quieres consumir agua cruda, mejor analízala primero. Solicita un kit de análisis de agua, por ejemplo, a través de TAPP Water (50€), envíalo a un laboratorio y sabrás lo que contiene y si es segura o no para beber.
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